¿Bien?

Vivía en una casa tan chica, que el “Bienvenidos” de la entrada, tenía tachada la s.

Ojos que no ven…

Era ciego y pensaba que todas sus novias lo engañaban con otro.

Sustos

Entré a un restaurante que quedaba en el medio de la montaña, quedé frente a un jabalí y me asusté mucho. Me asusté mucho más cuando sentí que se me acercaba. Y muchísimo más, cuando me di cuenta de que estaba embalsamado.

A dedo

Cada vez que me voy de vacaciones me gusta hacer dedo en la ruta. Al primero que me levanta y me pregunta dónde voy, le digo que a matar al del auto que pasó antes y no me quiso llevar.

Inesperado

El amor llega en el momento menos esperado. Partí una naranja al medio y me enamoré de una mitad.