viernes, 1 de agosto de 2008

Reglas en una primera cita:

Me lavo los dientes.
Compro chicles de menta.
Llevo cepillo de dientes.
Me miro al espejo unas veces de más.
Trato de lograr lo imposible: cubrir mis entradas.
Llego a horario por única vez.
Me río de cosas de las que no volveré a reírme.
Pongo cara de “Mirá qué interesante lo que estás diciendo”.
Me veo en un espejo y pienso “¿De quién es esa cara de boludo?”.
Pago la cena por única vez.
Como despacio por útima vez.
Pregunto por temas que nunca más volveré a preguntar.
No hablo de política ni religión.
No hablo de mí.
Me dicen "No sé nada de vos.".
Hago un esfuerzo para que no se me note la cara de “¿La pondré hoy?”.
Hago un esfuerzo mayor porque no se me note esa cara.
Me resigno a que se note esa cara.
No me resigno y pienso en hacerme una trasplante de cara por una de “Qué golazo”.
Hacia el final de la cita estoy casi seguro de que la pongo.
Mi intuición vuelve a fallar.

No hay comentarios: