100

Por fin llegó el día en el que cumplimos las primeras 100 observaciones (¿Viste esos que hablan en plural y en realidad están solos? –para referencias, buscar jugadores de fútbol-). Un número impensado 99 observaciones atrás. Gracias a todos los que entran cada tanto y lo leen. Gracias a los que dejan comentarios, sobre todo a los que se esfuerzan por explicar y ampliar mis observaciones, no se preocupen que siguen sin entenderse. Les pido disculpas por no poder contestar todos los comentarios, o ninguno. Y no quiero olvidarme de los que hacen su blog dentro del mío, no se me hubiera ocurrido nunca. Gracias a los que les pregunto si lo leyeron y se ríen, dejándome la duda si se ríen por que les gustó o por que se ríen nomás. Gracias a los que confiaron en mí y nunca me pidieron nada a cambio. Y a los que me pidieron algo a cambio pero no se enojaron porque no se los dí. Gracias a todos los blogs que leí, que entre líneas me decían “dale, armate el tuyo que es una boludes”. Gracias a todos los que ofrecieron comprármelo, pero levanten la oferta. Gracias a todos los que no ofrecieron comprármelo, por incentivarme a seguir escribiendo. Gracias a los que me pusieron entre sus favoritos, sobre todo a los que me pusieron antes de leer el blog, y hasta antes de escribirlo. Gracias a los que me dicen: “boludo, me pasó esa…”, sobre todo por el “boludo”. Y a los que me dicen “el otro día iba por la calle y no sabés lo que me pasó...” porque realmente no lo sé. Gracias a Su, por emocionarme con el “No puedo parar de leerlo”, gracias por ser mi hermana. Gracias a mi hermano por ser tan sincero y decirme que ni lo leyó y preguntarme cuáles eran las imágenes. Gracias a vos, si a vos, por leer cada línea y reírte no sólo en el blog sino también afuera, donde pasan cosas más reales (siempre quise dedicárselo a alguien y que lo supiera sólo ese alguien, ¿sabés de quién hablo no? No, de vos no, del de al lado). Gracias a todos mis maestros y profesores de física, química y matemática, por demostrarme que eso no era lo mío. Gracias a mis profesores de literatura, por no ir nunca a clase. Gracias a vos, si, a Boss Hugo. Gracias a todas las empresas de catering por mandar comida por mis 100 Primeras Observaciones, ojalá no esperen a las 200 para mandar más. Y gracias al aire, por ser como este blog, totalmente gratis.